De calma y silencio, poema que nos convoca a la 36 Bienal de Sao Paulo.
Viajar: experiencia activa de arte y performance.
¿Qué nos pasa cuando un poema nos arroja y nos sostiene, agrumándonos en las artes nuestras, indisciplinadas y vitales?
Ya nos estamos organizando grupalmente para compartir la propuesta de la próxima 36 Bienal de San Pablo, hacia donde viajaremos con quienes quieran sumarse, en los días de su inauguración, el próximo septiembre.
El punto de partida de la edición de esta Bienal, cuya curaduría e info general posteamos también en este espacio, es un poema de Conceição Evaristo, Da calma e do silêncio, que transcribimos y traducimos de mano propia y les compartimos:
Quando eu morder
a palavra, por favor,
não me apressem,
quero mascar,
rasgar entre os dentes, a pele, os ossos, o tutano
do verbo, para assim versejar
o âmago das coisas.
Quando meu olhar
se perder no nada,
por favor,
não me despertem,
quero reter,
no adentro da íris,
a menor sombra,
do ínfimo movimento.
Quando meus pés
abrandarem na marcha,
por favor,
não me forcem.
Caminhar para quê?
Deixem-me quedar,
deixem-me quieta,
na aparente inércia.
Nem todo viandante
anda estradas,
há mundos submersos,
que só o silêncio
da poesia penetra.
Cuando yo muerda
la palabra,
por favor,
no me prendan,
quiero masticar,
rasgar con los dientes,
la piel, los huesos, la médula
del verbo,
para así versificar
el corazón de las cosas.
Cuando mi mirada
se pierda en la nada,
por favor,
no me despierten,
quiero retener,
dentro del iris,
la menor sombra
del más ínfimo movimiento.
Cuando mis pies
disminuyan la marcha,
por favor,
no me fuercen.
Caminar, ¿para qué?
Déjenme quedarme
Déjenme quieta
en la aparente inercia
No todos los viajeros
recorren caminos,
hay mundos sumergidos,
que solo el silencio
de la poesía penetra.
Quienes quieran sumarse a nuestro viaje o a nuestros cursos, no tienen más que escribirnos a tallereskekena@gmail.com
Ahhhhhh me muero viajando
La melancolía,en letras